Como reumatólogo especializado en artrosis , durante años, una de las peores frustraciones  era como conseguir unas manos sin dolor ante pacientes que demandaban alivio con una artrosis en las manos. Lo habitual era asistir con impotencia al sufrimiento de estas pacientes ofreciendo, únicamente, anti-inflamatorios y escucha activa. El dolor y la rigidez no solo afectan las actividades cotidianas, sino también la calidad global de vida y el equilibrio psicológico. La inmensa mayoria de las pacientes viven frustradas (y con cierto grado de depresión o ansiedad) ansiando unas manos sin dolor (útiles) mientras asisten impotentes a la progresiva deformidad de sus dedos. Por desgracia, sin que la ciencia haga nada por remediarlo. En este post, compartiré cinco consejos novedosos y útiles, respaldados por la evidencia científica, para aliviar los síntomas de la artrosis en las manos. Estos consejos están diseñados para integrarse fácilmente en la rutina diaria y ofrecer alivio tangible.

  1. Ejercicios de Flexibilidad y Fuerza Específicos:
    • Diferentes estudios han demostrado la utilidad del ejercicio en la mejora del dolor y la rigidez de las manos. De todos ellos,  es destacable una prestigiosa revisión Cochrane  en la que los autores concluyen que los ejercicios específicos para mejorar la flexibilidad y la fuerza de las manos pueden reducir significativamente el dolor y mejorar la funcionalidad en pacientes con artrosis .
  2. Suplementos nutricionales con condroprotectores:
  3. Técnicas de Relajación y Mindfulness:
    • Debido a la ansiedad y frustración ocasionadas por unas manos permanenetemente dolorosas y cada vez más incapacitantes, la mayoría de las guías de práctica clínica para el manejo de la artrosis de manos aconsejan las técnicas de relajación y el mindfulness.
  4. Uso de Férulas y Soportes Ergonómicos:
  5. Terapias Térmicas:

Conclusión: La artrosis de manos,sin duda, sigue siendo un desafío, pero con estos consejos basados en la evidencia científica, usted puede encontrar alivio y mejorar su calidad de vida. Recuerde, es importante consultar con su reumatólogo antes de implementar cualquier nuevo tratamiento o cambio en su rutina de cuidado de la salud.

Hasta hace poco tiempo no hubiera sido posible escribir un post sobre nuevos tratamientos para la artrosis. La artrosis es la enfermedad reumática más común pero también (todo hay que decirlo) la más olvidada por la investigación. Sin embargo, en los últimos años, se van sucediendo continuas innovaciones, tanto para un diagnóstico más precoz, como para un tratamiento más eficaz. En este post vamos a repasar alguno de los avances más significativos.

Nuevos tratamientos para la artrosis no quirúrgicos

La agenda de la Industria farmacéutica para el desarrollo de fármacos que combatan la artrosis de una manera más efectiva y menos tóxica está en continua expansión. Aunque existen un buen número de fármacos muy prometedores, el equilibrio entre eficacia y toxicidad todavía no está bien conseguido. En paralelo a la industria farmacéutica, han irrumpido con mucha fuerza en los últimos años múltiples tratamientos naturales (no farmacológicos) basados en medicina regenerativa que se conocen, genéricamente, con el nombre de tratamientos ortobiológicos. Son tratamientos, por regla general, seguros que ofrecen un buen control de los síntomas (dolor e inflamación) en artrosis del miembro inferior. Todavía, no es posible afirmar que estos tratamientos regeneren el cartílago dañado o detengan la enfermedad pero, en un periodo breve de tiempo, esto podrá ser posible. Dado el valor lucrativo de estos tratamientos, es imprescindible ponerse en manos de un profesional reputado y con experiencia en estos tratamientos. Por último apuntar, unos esperanzadores tratamientos para la artrosis de rodilla que están aún en fase de investigación. Uno de ellos está basado en RNA de interferencia cortos mezclados con ácido hialurónico con el fin de implementar su efecto viscosuplementador (Proyecto SINPAIN). El otro, propone la utilización intra-articular nanopartículas de un medicamento utilizado para reducir el colesterol (fenofibrato) con el fin de ralentizar o detener la destrucción del cartílago.

Nuevos tratamientos para la artrosis quirúrgicos

La cirugía en la artrosis es la única opción a considerar cuando fracasa el tratamiento médico y rehabilitador. En los últimos años, el desarrollo de nuevas técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas ha cambiado radicalmente el panorama del paciente con artrosis que tiene que acabar operándose. Un ejemplo de ello es la cirugía de columna por artroscopia. La artroscopia es una técnica mucho menos cruenta que la cirugía abierta convencional, más selectiva, que tiene unos tiempos de recuperación mucho más cortos y menos dolorosos. La robótica cada vez está tomando más protagonismo en la colocación de prótesis. Hoy en día, en gran parte de los hospitales, se colocan prótesis de rodillas asistidas por robots . El robot calcula el corte del hueso con una precisión milimétrica ahorrando sangrado, dolor y disminuyendo la convalecencia. Aunque todavía no hay estudios disponibles, la cirugía robotizada de la prótesis de rodilla (debido a su mayor precisión) probablemente conlleve una mayor durabilidad de la prótesis.

Tecnologías de soporte externo y nuevos dispositivos

El desarrollo de tecnologías de soporte y dispositivos innovadores ha revolucionado la forma en que los pacientes gestionan la artrosis en su vida diaria. Desde ortesis personalizadas por impresoras 3D a nuevos exoesqueletos para caminar, estas tecnologías están diseñadas para aliviar la presión en las articulaciones afectadas y mejorar la movilidad. Además, las aplicaciones móviles y dispositivos de seguimiento permiten a los pacientes realizar ejercicios personalizados cómodamente en su domicilio, supervisados y monitorizados por su médico o fisioterapeuta.

Medicina de precisión en la artrosis

La medicina de precisión ha llegado para quedarse, y la artrosis no es una excepción. Con el análisis genético y la identificación de biomarcadores específicos, ya es posible calcular el riesgo de padecer artrosis. En muy poco tiempo, también será posible personalizar el tratamiento para el control de la enfermedad, aquel más eficaz y menos tóxico según las características del paciente artrósico.
Dado que cada vez vivimos más y queremos vivir mejor, a buen seguro, en los próximos años aparecerán nuevas opciones de tratamiento que cambien el panorama y el pronóstico de la artrosis (sea cual sea su localización).